No estamos a salvo,
El tiempo no se agota,
Somos nosotros
En la fragilidad de un adios,
En la linea de tu incertidumbre.

No somos de nadie,
Ni esta lucha es nuestra,
Es de los que mueren en las calles,
De quienes gritan verdad y libertad.

Esta causa, por la que peleamos,
Es por ellos, por nuestros padres
Por quienes han llorado sus errores,
Es por nuestros hijos, por sus sonrisas
Para darles un porque,
Una historia.

Somos solo almas perdidas
Retasos de un amor sin sentido
Barcos llenos de dudas
Voces mudas, manos cansadas.

No obstante,
Peleamos, sin dar cuartel, sin pedirlo
No somos nadie, es cierto, pero somos nosotros,
Los que lloramos una realidad sin sentido
Los que creemos, los que amamos,
Los que morimos perdidos en el olvido.

Roberto Arenas, ‘Paroxis’.

A veces pierdo el norte, me vuelvo frágil, débil como cuando niño, me lleno de tontos miedos y creo todo está perdido, no te encuentro y lo peor, no me encuentro. Pero luego pasa, me doy cuenta sigues aquí, que una posibilidad existe, que aún no he muerto.

No me rendiré, porque fue la promesa que al nacer hice, que por ti cumpliré…