Que no daría por vos,
Por vuestro mañana,
Por el corazón que late en tu pecho.

Sería al destino demasiado pedir (lo sé),
El poder cambiar al mundo,
Invocar la paz en nombre del amor,
Una tregua al olvido.

Todo por no perderte,
Por no morir,
Por verte despertar
A mi lado en algún amanecer.

Roberto Arenas, ‘Paroxis’.

“…darara, darara, darara…”